La Trinidad

A continuación encontrarán unas breves notas que nos permite ver cómo es posible afirmar que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son un Solo y Único Dios Verdadero.
Procuré decir lo menos posible, sin embargo en el texto bíblico se encuentran marcadas las similitudes y paralelismos.

La Pluralidad de Dios

En el Antiguo Testamento se habla a sí mismo en plural, pero las acciones son ejecutadas en singular.
Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.
Génesis 1:26-27
Y descendió Jehová para ver la ciudad y la torre que edificaban los hijos de los hombres. Y dijo Jehová: He aquí el pueblo es uno, y todos éstos tienen un solo lenguaje; y han comenzado la obra, y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer. Ahora, pues, descendamos, y confundamos allí su lengua, para que ninguno entienda el habla de su compañero. Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad.
Génesis 11:5-8
Jesucristo muestra el nombre (singular) de Dios: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. No es bautizar en los nombres, sino un solo nombre.
Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;
Mateo 28:19

Jesús y el Padre son Uno

Pablo dice de Jesucristo:
para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
Filipenses 2:10-11
Pero Jehová en el libro del profeta Isaías dice:
Por mí mismo hice juramento, de mi boca salió palabra en justicia, y no será revocada: Que a mí se doblará toda rodilla, y jurará toda lengua.
Isaías 45:23
Jesucristo dice de sí mismo en el Apocalipsis:
Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último; y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
Apocalipsis 1:17-18
Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que estuvo muerto y vivió, dice esto:
Apocalipsis 2:8
Pero Jehová dice esto:
Así dice Jehová Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mí no hay Dios.
Isaías 44:6
Óyeme, Jacob, y tú, Israel, a quien llamé: Yo mismo, yo el primero, yo también el postrero.
Isaías 48:12
El libro de Apocalipsis nos dice que la salvación pertenece a Dios y al Cordero (Cristo):
y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero.
Apocalipsis 7:10
Pero en el Antiguo Testamento dice que la salvación es de Jehová:
La salvación es de Jehová;
Sobre tu pueblo sea tu bendición.
Salmos 3:8
Bueno es esperar en silencio la salvación de Jehová.
Lamentaciones 3:26
Y todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo; porque en el monte de Sion y en Jerusalén habrá salvación, como ha dicho Jehová, y entre el remanente al cual él habrá llamado.
Joel 2:32
Mas yo con voz de alabanza te ofreceré sacrificios;
Pagaré lo que prometí.
La salvación es de Jehová.
Jonás 2:9
El mismo Jesucristo estando en esta tierra afirmó ser uno con Dios, los judíos lo sabían y Tomás lo reconoció:
Yo y el Padre uno somos.
Juan 10:30
Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras.
Juan 14:11
Y Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo.
Por esto los judíos aún más procuraban matarle, porque no sólo quebrantaba el día de reposo, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios.
Juan 5:17-18
Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!
Juan 20:28
Jesucristo declaró su preexistencia:
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy.
Juan 8:58
Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese.
Juan 17:5
Pablo no solo lo reconoce como preexistente sino como el principal agente de la creación:
Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten
Colosenses 1:15-17
para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de él.
1 Corintios 8:6
El libro de los Proverbios retrata a la Sabiduría de Dios y cómo obró ella en la creación, en tanto que Pablo dice que Cristo es la Sabiduría de Dios:
Para hacer que los que me aman tengan su heredad,
Y que yo llene sus tesoros.
Jehová me poseía en el principio,
Ya de antiguo, antes de sus obras.
Eternamente tuve el principado, desde el principio,
Antes de la tierra.
Antes de los abismos fui engendrada;
Antes que fuesen las fuentes de las muchas aguas.
Antes que los montes fuesen formados,
Antes de los collados, ya había sido yo engendrada;
No había aún hecho la tierra, ni los campos,
Ni el principio del polvo del mundo.
Cuando formaba los cielos, allí estaba yo;
Cuando trazaba el círculo sobre la faz del abismo;
Cuando afirmaba los cielos arriba,
Cuando afirmaba las fuentes del abismo;
Cuando ponía al mar su estatuto,
Para que las aguas no traspasasen su mandamiento;
Cuando establecía los fundamentos de la tierra,
Con él estaba yo ordenándolo todo,
Y era su delicia de día en día,
Teniendo solaz delante de él en todo tiempo.
Me regocijo en la parte habitable de su tierra;
Y mis delicias son con los hijos de los hombres.
Proverbios 8:22-31
Porque los judíos piden señales, y los griegos buscan sabiduría; pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura; mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios.
1 Corintios 1:22-24
El autor de Hebreos (a título personal supongo que se trata del Apóstol Pablo) cita un Salmo y le atribuye a Jesucristo la autoría de la creación, en tanto que el Salmo se refiere a Jehová:
Y:
Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra,
Y los cielos son obra de tus manos.
Hebreos 1:10
Desde el principio tú fundaste la tierra,
Y los cielos son obra de tus manos.
Salmos 102:25
El autor de Hebreos también señala que el autor y sustentador de todas las cosas es quien padeció en la cruz:
Porque convenía a aquel por cuya causa son todas las cosas, y por quien todas las cosas subsisten, que habiendo de llevar muchos hijos a la gloria, perfeccionase por aflicciones al autor de la salvación de ellos.
Hebreos 2:10

Jesús y el Espíritu Santo son Uno

El libro de Apocalipsis en su primer capítulo nos da una descripción de Jesucristo que nos sirve de indicación para saber que es Él mismo quien dicta el mensaje a las siete iglesias de Asia Menor en los capítulos 2 y 3. Sin embargo al final de cada carta se dice que es el Espíritu quien lo dice a las iglesias.
A continuación una descripción de Jesucristo, los énfasis en negrita están para marcar claramente las referencias en los demás versos que se citarán y demostrar que es Jesucristo quien habla en ellos.
Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo; y vuelto, vi siete candeleros de oro, y en medio de los siete candeleros, a uno semejante al Hijo del Hombre, vestido de una ropa que llegaba hasta los pies, y ceñido por el pecho con un cinto de oro. Su cabeza y sus cabellos eran blancos como blanca lana, como nieve; sus ojos como llama de fuego; y sus pies semejantes al bronce bruñido, refulgente como en un horno; y su voz como estruendo de muchas aguas. Tenía en su diestra siete estrellas; de su boca salía una espada aguda de dos filos; y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza.
Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas; yo soy el primero y el último; y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y tengo las llaves de la muerte y del Hades.
Apocalipsis 1:12-18
Cristo habla a la iglesia en Éfeso
Escribe al ángel de la iglesia en Efeso: El que tiene las siete estrellas en su diestra, el que anda en medio de los siete candeleros de oro, dice esto:
Apocalipsis 2:1
Pero es el Espíritu el que le dice estas cosas a las iglesias
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.
Apocalipsis 2:7
Jesús a Esmirna
Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que estuvo muerto y vivió, dice esto:
Apocalipsis 2:8
El Espíritu le habla a las iglesias
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de la segunda muerte.
Apocalipsis 2:11
El Salvador a Pérgamo
Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto:
Apocalipsis 2:12
El Espíritu le habla a las iglesias
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe.
Apocalipsis 2:17
Cisto a Tiatira
Y escribe al ángel de la iglesia en Tiatira: El Hijo de Dios, el que tiene ojos como llama de fuego, y pies semejantes al bronce bruñido, dice esto:
Apocalipsis 2:18
Pero es el Espíritu el que continúa hablando a las iglesias
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
Apocalipsis 2:29
También a Sardis le escribe Jesús
Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: El que tiene los siete espíritus de Dios, y las siete estrellas, dice esto: Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto.
Apocalipsis 3:1
El Espíritu le habla a las iglesias
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
Apocalipsis 3:6
Cristo le manda a escribir a Filadelfia
Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre:
Apocalipsis 3:7
El Espíritu continúa escribiéndole a las iglesias
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
Apocalipsis 3:13
Jesucristo le escribe finalmente a Laodicea
Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto:
Apocalipsis 3:14
Y finaliza diciendo que fue el Espíritu el que habló
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
Apocalipsis 3:22

Es Espíritu Santo es Dios

El Apóstol Pedro en un mismo pasaje dice que el Espíritu Santo es Dios y también lo llama el Espíritu del Señor
Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios.
Hechos 5:3-4
Y Pedro le dijo: ¿Por qué convinisteis en tentar al Espíritu del Señor? He aquí a la puerta los pies de los que han sepultado a tu marido, y te sacarán a ti.
Hechos 5:9

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